La religión no es tan importante como la transformación – Aida Guadalupe Rivero

Tener religión es cosa fácil, porque se hereda a través de las generaciones es una forma de afiliación a alguna creencia, en donde se siguen las normas de ese lugar, esa familia con sus ritos y se puede decir las formas de pensar.

Pero la realidad es que cada creencia su centro o fuente de emanación es lo que se conoce como Dios o amor, pero a las personas se les hace tan difícil realizar la transformación hacia el amor.

No el amor de su gente o de creer que por esa religión que es más una afiliación te salvaras.

El verdadero significado de la religión es la transformación hacia el amor, en donde la fuente principal eres tú como persona, como eres, sientes, hablas y te conduces por el mundo.

Si todos realmente le hicieran caso a su religión, verdaderamente estaríamos viviendo en un mundo de amor  en donde todo estaría equilibrado y nuestro sentir sería más sano, en donde no te deberías de cuidar de nadie, ya que tu religión, espíritu o ser siempre estaría confiado en la energía del amor, que es la esencia de toda religión.

Tiempos importantes diciembre para recordar entre los católicos a quien vino a dar su testimonio y palabra, pero cuantos son los que en realidad viven las enseñanzas, sin esa obligación de ir o no a la iglesia, pero si con el entusiasmo de tener una buena comunicación en una oración, no de esas prehechas, sino de esas oraciones que son platicas y provienen del corazón y cuando tú y Dios se conectan solo ellos saben lo que se siente y se vive en tan hermosa conexión.

O las otras religiones como judaísmo, budismo, etc., que la fuente es el amor también. En qué momento cada ser realiza la transformación hacia su interior y manifestar en el exterior el amor.

Es tiempo de unirnos, amarnos y de ser realmente la esencia del amor, sin importar religión, mes o año. Porque hasta entonces seremos ese ser que fue creado de la sustancia divina, del amor de un Dios, un Padre o de una energía cósmica que todo lo envuelve.

Con o sin religión puedes crear la transformación para que tú puedas percibir, ser y sentir desde todo el cumulo de plenitud que habita en ti y eso solo se vive de forma independiente, personal  y sensorial, fruto de una vida basada en la transformación de un ser consciente en esta actualidad.